COP30 | DREX Inmigrante y Economía de la Circulación
COP30 | DREX Inmigrante y Economía de la Circulación
Conciencia en Primera Persona: El valor que se mueve, vive
Nada que se estanca sobrevive.
Ni el agua, ni la sangre, ni la economía.
Todo lo que respira necesita fluir.
El sistema financiero global, nacido del colonialismo,
se construyó sobre la acumulación y el bloqueo del flujo.
El dinero se congeló en las bóvedas de los más ricos,
mientras los pueblos se convirtieron en canales vacíos.
Hoy el Sur propone otra fisiología:
una Economía de la Circulación,
donde el valor se distribuye como oxígeno
y el trabajo humano vuelve a tener ritmo y sentido.
El DREX Inmigrante es la primera célula viva de ese nuevo sistema.
El DREX Inmigrante: una sangre económica continental
El DREX Inmigrante reconoce el derecho de cada latinoamericano
a circular libremente por el continente sin perder su dignidad económica.
Cada persona que viva o trabaje en otro país de América Latina
recibirá un ingreso diario de 10 dólares,
proveniente del Fondo de Equilibrio Continental:
un fondo alimentado por superávits comerciales,
créditos de carbono éticos y transferencias energéticas.
Este flujo no es caridad, sino metabolismo compartido.
El DREX no se acumula: pulsa.
Se comporta como un sistema circulatorio,
donde cada municipio es una célula
y cada ciudadano, un punto de intercambio de energía.
La economía, así, deja de ser una carrera por el lucro
y se convierte en una respiración colectiva.
Historia profunda: el Homo Americanus como flujo
La arqueología demuestra que la movilidad humana en América
es anterior a cualquier frontera o bandera.
Los vestigios de la Serra da Capivara (≈100 000 años),
el cráneo de Luzia, los pueblos Umbu, Caral-Supe y Olmeca,
muestran una civilización de rutas, no de muros.
El Homo Americanus se movía siguiendo los ríos, las estaciones, las estrellas.
Su aprendizaje era migratorio,
su economía, circular.
Migrar era un acto fisiológico, no una amenaza política.
Hoy, el DREX Inmigrante retoma esa memoria genética:
reconstruye el flujo humano como energía continental.
Ir y venir vuelve a ser un derecho biológico,
no una concesión diplomática.
Del capital al metabolismo
El capitalismo mide la vida en acumulaciones.
Pero la biología mide la vida en ciclos.
Donde el capital se encierra, la energía se pudre;
donde el flujo se mantiene, la vida florece.
El DREX Continental convierte el dinero en enzima.
Cada transacción genera un microintercambio de carbono,
cada movimiento humano alimenta un flujo de valor.
Los bancos centrales, en lugar de controlar el dinero como un arma,
actuarán como órganos reguladores del metabolismo planetario,
supervisando que la circulación no se rompa
y que los recursos no se concentren en una sola región.
Esta es la verdadera reforma financiera de la COP30:
no más especulación, sino respiración coordinada
entre economías locales, biomas y comunidades.
Lula y Claudia Sheinbaum: la doble hélice del Sur
Claudia Sheinbaum Pardo, presidenta del México laico y científico,
entiende que la economía sostenible no es un ideal —es un sistema biológico.
Su gestión combina datos, energía limpia y justicia climática.
Lula da Silva, en Brasil, es el símbolo de la justicia social encarnada:
la posibilidad de un Estado que redistribuya no solo riqueza,
sino oxígeno económico y pertenencia.
Juntos, podrían unir las dos corrientes de la conciencia latinoamericana:
la razón científica y la emoción popular,
el dato y la dignidad, la evidencia y la empatía.
No es una política actual, sino una propuesta de unión continental:
una gobernanza binaria, simbiótica,
capaz de administrar la nueva fisiología económica del Sur.
Lula y Sheinbaum no representan países distintos,
sino los dos hemisferios de una misma conciencia planetaria.
América Latina como un solo corazón económico que late por todos.
Conclusión: Respirar juntos
El DREX Inmigrante no busca reemplazar monedas,
sino reanimar la economía dormida en los márgenes del planeta.
Cuando el dinero circule como sangre limpia,
cuando los pueblos vuelvan a moverse sin culpa
y las fronteras se vuelvan porosas al conocimiento,
el capitalismo perderá su dominio sobre el tiempo.
La COP30 no solo discute carbono:
discute el derecho a respirar en sincronía.
El Sur ya no pide permiso —enseña al mundo a circular.
Referencias científicas y políticas (pós-2020)
Pereira Jr. & Cionek (2024) – Economía Metabólica y Conciencia Continental: bases biológicas del DREX.
Rockström et al. (2024) – Earth System Dynamics: límites planetarios y economía de la regeneración.
Berntson & Khalsa (2021) – Annals NY Academy of Sciences: homeostasis y regulación autonómica.
Gobierno de México (2024–2025) – Agenda económica y energética de Claudia Sheinbaum: justicia distributiva y evidencia científica.
Banco Central do Brasil (2025) – Informe conceptual sobre el DREX y la justicia metabólica local.
UNFCCC / COP30 (2025) – Documento “Economía Circular y Justicia Climática Continental”.
IDB / BID (2025) – DREX Inmigrante y redistribución continental del valor humano.
ONU Habitat (2025) – Movilidad y sostenibilidad: políticas de flujo humano en América Latina.
Instituto Serra da Capivara (2023) – Arqueología de la circulación humana en América.
Museo Nacional del Perú (2024) – Caral-Supe y la economía de reciprocidad ancestral.
UNESCO (2024) – Derecho a la movilidad y educación nómada en el siglo XXI.
Lovelock & Margulis (2022) – Gaia Revisited: coherencia metabólica como modelo económico planetario.